4 de la mañana, suena la alarma, te levantas de un brinco en medio de una mañana lluviosa y desierta y dices gracias dios por levantarme de nuevo, gracias por lo que me das y ayúdame a seguir de pie en medio de todo esto que me esta sucediendo.
Han pasado ya 20 horas desde que te enteraste que estas enferma, ese día que te entregan el examen llegas a casa y te sientas frente a la computadora para buscar que es lo que tienes, que tan grave es, que va a pasar con tu vida, porque realmente no sabes la razón de lo que pasa, solo una simple coincidencia, un examen de rutina y tu mundo se nubla y se derrumba de un momento a otro.
Buscas en la web y solo encuentras cirugía no ves mas opciones y ves que lo que tienes te puede llevar a la muerte, sabes que tienes que cuidar de ti, pero realmente eso no te importa, ahora lo único que interesa en ese momento son las lagrimas que corren por tu cara al pensar que estas cansada de tu vida, de estar enferma, de tantas cirugías y de que cada examen que te hagas te salga mal. Piensas en tus planes, en tu pareja, en la universidad y por último sales de esta realidad para meterte en la que tienes que continuar hoy 2 de septiembre del año 2008.
Te paras de la cama y ves a tu perrita voleándote la cola para darte los buenos días, en medio de tus lagrimas le dices: buenos días mi princesa, como amaneces hoy. Sigues tu rumbo entras al baño tomas una ducha y aunque te duela intentas despertar y cambiar un poco tu cara aunque no lo logres.
Tu mama se levanta y te saluda, hola hija ¿como estas, como amaneciste? te das cuenta que esta preocupada y que la noche anterior también lloró, esto te pone mas mal pero te quedas callada y solo respondes bien mama gracias.
Te diriges a tu cuarto ves la foto de tu abuela y mas aun tus ojos quieren brotar lágrimas pero no lo haces, piensas que ya fue suficiente y mejor te haces la fuerte; continúas escogiendo que te vas a poner hoy. Luego te diriges a la cocina haces un almuerzo rápido porque hoy no regresas a tu casa hasta la noche o tal vez no regreses, le sirves la comida a Arena y le das un beso diciéndole te amo.
De nuevo te diriges al baño te lavas los dientes, te hechas un poco de agua en la cara por ultima vez, antes de organizar tu rostro para cubrir las lagrimas y las ojeras de la noche anterior.
Luego revisas tu maleta y ya tienes todo listo, apagas las luces y sales de tu casa, abres la puerta y un frío recorre todo tu cuerpo, es una mañana fría y desolada, como nunca antes la habías visto, aunque en este momento piensas que tal vez es tu mundo el que esta vacio y crudo.
En tu camino para coger el bus, te das cuenta que se te queda el celular, te devuelves inmediatamente, abres la puerta de tu casa saludas de nuevo a Arena, coges el celular y sales rápido para no llegar tarde.
Esperas un rato y el bus no llega y precisamente hoy que te sientes mal no hay nadie mas allí, estas sola y solo quieres salir corriendo y gritar, finalmente emprendes tu camino, el camino mas largo que tal vez hayas tenido, mil pensamientos pasaron por tu cabeza al repasar cada palabra que leíste sobre lo que tienes.
Llegas a la universidad y tu cara cambia inmediatamente como si nada hubiera pasado, la verdad no tienes ánimos de oír ni de escuchar a nadie, y piensas, ¿vale la pena estar aquí, vale la pena seguir si no se si pueda hacerlo?, pues aunque te lo hayas preguntado como siempre ese perfeccionismo y la sed de conocimiento que tienes te hacen continuar y olvidar por un instante lo que pasa.
Por fin el celular sonó, por fin una voz de aliento, una voz de amor que te hace renacer y continuar viviendo, dices : halo y un hombre al otro lado te dice hola mi vida como estas como amaneciste hoy; tu solo le dices, no te puedo mentir estoy muy mal pero escucharte me hace sentir ganas de seguir, inmediatamente después de aquellas palabras le dices amor estoy en clase luego hablamos, yo te llamo; el te responde, bueno mi vida te amo mucho cuídate y animo que todo va a estar bien, esas palabras te dan ganas de llorar pero tragas fuerte y le dices si mi amor yo se, tranquilo voy a estar bien, te amo amor, chao, ahora hablamos.
En este momento te encuentras escribiendo sobre tus sentimientos y aunque te derrumbes por dentro por fuera eres una luchadora que a pesar de lo que pase continuas tu día con responsabilidad y entrega como siempre lo has hecho, esperando a que el tiempo inexorable pase y decida que pasara con tu vida.
Han pasado ya 20 horas desde que te enteraste que estas enferma, ese día que te entregan el examen llegas a casa y te sientas frente a la computadora para buscar que es lo que tienes, que tan grave es, que va a pasar con tu vida, porque realmente no sabes la razón de lo que pasa, solo una simple coincidencia, un examen de rutina y tu mundo se nubla y se derrumba de un momento a otro.
Buscas en la web y solo encuentras cirugía no ves mas opciones y ves que lo que tienes te puede llevar a la muerte, sabes que tienes que cuidar de ti, pero realmente eso no te importa, ahora lo único que interesa en ese momento son las lagrimas que corren por tu cara al pensar que estas cansada de tu vida, de estar enferma, de tantas cirugías y de que cada examen que te hagas te salga mal. Piensas en tus planes, en tu pareja, en la universidad y por último sales de esta realidad para meterte en la que tienes que continuar hoy 2 de septiembre del año 2008.
Te paras de la cama y ves a tu perrita voleándote la cola para darte los buenos días, en medio de tus lagrimas le dices: buenos días mi princesa, como amaneces hoy. Sigues tu rumbo entras al baño tomas una ducha y aunque te duela intentas despertar y cambiar un poco tu cara aunque no lo logres.
Tu mama se levanta y te saluda, hola hija ¿como estas, como amaneciste? te das cuenta que esta preocupada y que la noche anterior también lloró, esto te pone mas mal pero te quedas callada y solo respondes bien mama gracias.
Te diriges a tu cuarto ves la foto de tu abuela y mas aun tus ojos quieren brotar lágrimas pero no lo haces, piensas que ya fue suficiente y mejor te haces la fuerte; continúas escogiendo que te vas a poner hoy. Luego te diriges a la cocina haces un almuerzo rápido porque hoy no regresas a tu casa hasta la noche o tal vez no regreses, le sirves la comida a Arena y le das un beso diciéndole te amo.
De nuevo te diriges al baño te lavas los dientes, te hechas un poco de agua en la cara por ultima vez, antes de organizar tu rostro para cubrir las lagrimas y las ojeras de la noche anterior.
Luego revisas tu maleta y ya tienes todo listo, apagas las luces y sales de tu casa, abres la puerta y un frío recorre todo tu cuerpo, es una mañana fría y desolada, como nunca antes la habías visto, aunque en este momento piensas que tal vez es tu mundo el que esta vacio y crudo.
En tu camino para coger el bus, te das cuenta que se te queda el celular, te devuelves inmediatamente, abres la puerta de tu casa saludas de nuevo a Arena, coges el celular y sales rápido para no llegar tarde.
Esperas un rato y el bus no llega y precisamente hoy que te sientes mal no hay nadie mas allí, estas sola y solo quieres salir corriendo y gritar, finalmente emprendes tu camino, el camino mas largo que tal vez hayas tenido, mil pensamientos pasaron por tu cabeza al repasar cada palabra que leíste sobre lo que tienes.
Llegas a la universidad y tu cara cambia inmediatamente como si nada hubiera pasado, la verdad no tienes ánimos de oír ni de escuchar a nadie, y piensas, ¿vale la pena estar aquí, vale la pena seguir si no se si pueda hacerlo?, pues aunque te lo hayas preguntado como siempre ese perfeccionismo y la sed de conocimiento que tienes te hacen continuar y olvidar por un instante lo que pasa.
Por fin el celular sonó, por fin una voz de aliento, una voz de amor que te hace renacer y continuar viviendo, dices : halo y un hombre al otro lado te dice hola mi vida como estas como amaneciste hoy; tu solo le dices, no te puedo mentir estoy muy mal pero escucharte me hace sentir ganas de seguir, inmediatamente después de aquellas palabras le dices amor estoy en clase luego hablamos, yo te llamo; el te responde, bueno mi vida te amo mucho cuídate y animo que todo va a estar bien, esas palabras te dan ganas de llorar pero tragas fuerte y le dices si mi amor yo se, tranquilo voy a estar bien, te amo amor, chao, ahora hablamos.
En este momento te encuentras escribiendo sobre tus sentimientos y aunque te derrumbes por dentro por fuera eres una luchadora que a pesar de lo que pase continuas tu día con responsabilidad y entrega como siempre lo has hecho, esperando a que el tiempo inexorable pase y decida que pasara con tu vida.
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